La rebaja de la calificación de EE. UU. por parte de Standard & Poor's (S&P) sigue teniendo consecuencias. Los Ángeles ha decidido rechazar los servicios de la agencia por falta de solidez e incompetencia.
Según las autoridades de Los Ángeles, "la ciudad debe estar orgullosa de que se rompan relaciones con la agencia de calificación". "La caída de los mercados, junto con la crisis de las hipotecas causadas por el hecho de que organizaciones como Standard & Poor's concedieron las calificaciones más altas a los valores de las corporaciones que estaban realmente sin valor y por ahora han desaparecido" son las causas, agregaron las autoridades de Los Ángeles. "Realmente hemos perdido la fe en el juicio de S&P", afirmaron.
Hace unos días la agencia bajó la calificación de valores de inversión de Los Ángeles de 'AAA' a 'AA'.
Además, la cancelación del contrato podría salvar a la ciudad de 16.000 dólares cada año.
Anteriormente, S&P privó a Estados Unidos por primera vez en la historia de la máxima calificación crediticia de 'AAA', lo que llevó al colapso de los mercados mundiales. Los analistas de la agencia informaron de que la razón de la rebaja radica en el temor sobre el crecimiento del déficit presupuestario del país. En su opinión, la eficacia de la política de EE. UU. en el campo de las finanzas se debilitó.
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